TERCERA LEY: EL PRINCIPIO DE VIBRACIÓN
EL GRAN LIBRO DEL KYBALIÓN...
LAS LEYES DE LA "FRECUENCIA” Y DE "LA ATRACCIÓN"... página 91 a 94 del libro…
LA LEY DE LA "FRECUENCIA" EN EL PRINCIPIO
DE VIBRACIÓN
1. LA LEY DE LA "FRECUENCIA"
El miedo tiene una vibración pesada y de baja frecuencia La serenidad, la paz, y el amor tienen, una vibración de alta frecuencia. El humor disuelve situaciones difíciles y eleva la energía. El amor quita la pesadumbre. Las vibraciones elevadas y ligeras disuelven las bajas y pesadas. El pánico se extiende como un incendio forestal, la presencia de una persona serena apaga las llamas y calma los temores. Las personas críticas lanzan dardos energéticos de baja frecuencia. El enfado son energías de baja vibración y detrás siempre está el miedo y un sentimiento de impotencia.
Al estar sereno, emitimos una vibración elevada. Nos sentimos fuertes y al tener esta energía expresamos nuestra verdad. Al expresar lo que sentimos, disolvemos los sentimientos de enfado. Porque una sola manzana podría estropear todas las del cesto. Una mala persona puede corromper a otras más débiles, pero no afectan a las fuertes. Una persona fuerte con intención firme, puede influir positivamente sobre personas malas. Los profesores saben que, si están nerviosos o tensos, los niños se comportarán mal. Si estás fuerte, confiado y lleno de amor, los animales y plantas responderán positivamente a la elevada frecuencia que emites. La culpa, el miedo, el resentimiento o la obligación no son buenas razones para hacer las cosas. Cuando haces lo que quieres hacer, irradias energía de alta frecuencia.
Cuando hacemos cosas que
nos dan alegría, elevamos la frecuencia y la de las personas que nos rodean. La
falta de amor propio es debido al carácter negativo que mantienes contigo
mismo, es una imaginación oscura que emite una vibración baja. La autoestima y
la confianza irradian luz de alta frecuencia. ¿Pregúntate quién eres realmente?
un ser asombroso, una persona hermosa, increíble, si te das cuenta de ello y
actúas de buen corazón, irradias una vibración elevada. Tienes que darte cuenta
de quién eres y aceptarlo.
Utiliza tu imaginación cada
vez que respiras, que cojas confianza, alegría y la vibración tendrá colores
hermosos en tu aura. Visualiza soluciones positivas a tus metas. Así elevarás
tu frecuencia, vivirás desde la bondad, la alegría y se disuelven las emisiones
de baja frecuencia de otras personas y elevarás el nivel de conciencia.
Los libros metafísicos, la
música clásica y los cuadros hermosos elevan la vibración del lugar donde te
encuentras. La enfermedad tiene una vibración pesada y bloquea la corriente de
fuerza vital necesaria. La sanación sucede cuando se transmite energía de
elevada frecuencia. Se transmuta la vibración pesada de la enfermedad y aparece
la salud. La riqueza material tiene una vibración, si quieres ser rico, piensa
en términos de riqueza. El éxito tiene su propia frecuencia. Si quieres
aumentar tu vibración relaciónate con personas con bondad espiritual. Así la
vibración de estas personas empieza a fusionarse. Tu nombre tiene una
vibración, cuando se pronuncia; tus lecciones de vida también vibran. Antes de
que nacieras, enviaste telepáticamente a tus padres el nombre que deseabas
tener. Si cambias el nombre atraes lecciones nuevas. Pronuncia tu nombre y el
de los demás con amor y sentirás la frecuencia del amor. Irradia energía de
amor y transmutarás la infelicidad de todos los que te rodean. Las lecciones
que estás aprendiendo son para liberar la rabia y las energías negativas, son
para dejar ir lo viejo, aprender a relacionarte con los demás, sé honesto, sé consciente
de quién eres y cómo es el mundo, vive en el aquí y ahora, sé tú mismo. Expresa
tu yo auténtico, marca los límites y reconoce cuáles son tus emociones, y
cuáles pertenecen a los demás. No asumas responsabilidades que no son tuyas.
LA LEY DE LA "ATRACCIÓN” EN EL PRINCIPIO DE VIBRACIÓN
2. LA LEY DE "LA ATRACCIÓN”
Algunas de tus cualidades son magnéticas y otras repelentes, viven en tu inconsciente y transmiten tu energía. Has atraído hacia ti, toda situación y persona que está en tu vida. Otras cosas y personas habrán salido repelidas. Muchas situaciones no ejercen ninguna influencia magnética hacia ti. Eres un transmisor de radio emite en una frecuencia concreta. Cualquiera que se interese por ese programa emitido en esa longitud de onda lo puede sintonizar. Tú eres un transmisor. Emites la historia de tu vida. Envías hacia las ondas, la historia de tus creencias, tú energía emocional, tu estructura mental, tus gustos y tus aversiones, y muchas cosas más. De la misma forma atraemos a las personas hacia nosotros. La gente que no se hace eco de tu frecuencia, simplemente no se siente atraída. Pasarán por tu lado sin detenerse, sin verte porque su mundo, su universo están en otra onda.
La vibración que emites está formada por tu energía consciente e inconsciente, atraes lo que es similar a ti. La gente atrae a sus vidas, a personas y situaciones que tienen vibraciones similares a las suyas. La escasez, la depresión, la ambición, o la desvalorización conducen a una frecuencia baja. El amor, la gentileza, la dicha, la generosidad transmiten una energía de frecuencia elevada y magnetizan a personas de energía similar.
El Universo, nos ofrece espejos para que nos miremos en ellos. Mira a tu alrededor y observa a los personajes que te rodean. Una persona que siempre está alegre y feliz, pero que parece estar rodeada de gente deprimida, puede estar indicando que las ha atraído para reflejar su infelicidad interior. Y a su vez, esas personas también responden a un propósito, el de hacerse sentir necesaria, como un salvador. La desvalorización, la desesperación es algo que repele. Cuando se buscan hijos desesperadamente y no llegan, deciden rendirse o desapegarse; hacen de sus vidas cobren otro sentido, sin ese hijo, se produce un cambio energético y se emite una energía magnética distinta, positiva que atrae a otro espíritu del Universo y sin darse cuenta del tiempo que pasan sin estrés, de repente se encuentran esperando a un hijo.
Lo mismo sucede cuando se
está desesperado por tener pareja. Los demás captan esa desesperación y se
retiran. Cuando cambian esa energía por otro amor más abierto y de aceptación,
atraen a la persona adecuada. Si crees que tienes que servir a los demás,
atraerás a personas que de algún modo necesitan atención. Una mujer que siempre
atraía a parejas que la engañaban se dio cuenta de que en su interior creía que
no es seguro confiar en alguien; y eso hacía que atrajera a personas capaces de
engañarla. Cuando sanó esa creencia, atrajo a una pareja en la que sí podía
confiar Hay personas maravillosas por fuera, pero se vuelven exigentes,
necesitadas, celosas, son especialistas en montar números y atraen a parejas,
que están dispuestos a ser engañados por la apariencia exterior. Se quejan del
tipo de parejas que tienen en su vida y viceversa, ellas se quejan de ellos. Si
un hombre va emitiendo el mensaje de “soy controlador y estoy buscando a una
mujer a quien dominar” atraerá a mujeres que permitan que las domine. Una mujer
que se haya hecho cargo de su propio poder, no se sentirá atraída hacia esa
vibración.
Si no estás en armonía con
la vida, puedes atraer alimentos que te sienten mal. Bromeando un poco puedes
atraer a mosquitos que te piquen. Siempre que realices algo y creas estás
obligado hacerlo, que es tu deber, o que estás atado; es posible que
inconscientemente tu conciencia sigue dormida. Recuerda atraes a todo lo que
reprimes, aunque sea inconscientemente atraerás a personas y situaciones que te
mantendrán atado a esa situación.
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Paco Cifuentes
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